AGOSTO, MES DE LAS PERSONAS MAYORES
Para aquellos que lo desconocen, el mes de Agosto es el “Mes del Adulto Mayor” y no lo es por simple capricho de este grupo poblacional, sino porque la Ley 271 de 1996 establecida por el Congreso de la República de Colombia así lo estipuló. Pero hablar de esta celebración resulta un poco complejo en un ciudad como Medellín donde el 10% de sus adultos mayores están en condiciones de pobreza extrema.
Sin embargo, el llamado es, sobre todo, a las generaciones más jóvenes y que se encuentran en proceso de envejecimiento para que presten especial atención a estos indicadores y se trabaje para modificarlos en un futuro no muy lejano, porque la vejez no es sinónimo de enfermedad, ni de pobreza; siempre y cuando se construya a temprana edad todo un conjunto de factores protectores que garanticen una vejez con calidad.
No obstante, es necesario hacer mención que precisamente la celebración del mes del adulto mayor tiene un mensaje de sensibilización y de reconocimiento a esos seres de edades avanzadas que han entregado su fuerza vital, su experiencia y demás, hacia la construcción de familias y de comunidades durante tantos años.
La Sociedad de San Vicente de Paúl de Medellín se vincula también a expresar su profunda gratitud hacia las personas mayores, más aun cuando la gran mayoría de los asociados vicentinos en la actualidad también son adultos mayores y demuestran día a día su incansable deseo de servicio a los más necesitados, y continúan demostrando que el hecho de tener 60, 70 o más años no significa desvinculación de acciones o incapacidad, ya que la vejez no se mide por la edad sino por la actitud y las ganas con las que cada día salimos a enfrentar el mundo.
En los clubes de vida de la Sociedad, esta celebración se llevará a cabo a través de Encuentros Familiares, entre el 22 y 26 de agosto. La propuesta no es meramente de festividad, sino de concientizar sobre el valor de las personas mayores al interior de sus familias, la importancia de fortalecer los vínculos familiares y además la necesidad de ir preparándose para la vejez desde edades tempranas.
Agradecemos profundamente a los asociados de las diferentes Conferencias que trabajan incansablemente por prestar un servicio a los adultos mayores de la ciudad y los invitamos a continuar en esta hermosa labor que en muchas ocasiones simplemente requiere es tiempo para sentarse y escuchar las alegrías o tristezas de las personas.
Esperamos también que las diversas acciones de las entidades públicas y privadas de la ciudad conduzcan a mejorar la calidad de vida de las personas mayores y que aporten a que las generaciones jóvenes vayan construyendo un modelo de vejez exitoso y satisfactorio.